Abinader, auditorías en PN y 46 casos de corrupción en su gobierno
¡Cógelo, Picante! El que dice lo que no debe, oye lo que no quiere
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Buenos días…
Creemos que al presidente Luis Abinader hay que decirle sus verdades, aunque le pique, pero debemos hacerlo con altura y con respeto, recordando que los cortés no quita lo valiente.
Ciertamente, el presidente Abinader, una y reiteradas veces ha dicho que no permitirá la corrupción, y que si se presentan pruebas contra funcionarios, actuará de inmediato. Y sin embargo, ha tenido pruebas en sus manos, y no ha hecho nada.
La misma historieta de Danilo Medina cuando era presidente, y al final, su régimen, 2012-2020, ha sido considerado el más corrupto de toda la historia.
Sin embargo, es posible que, después del 2028, haya una competencia para determinar dónde hubo más corrupción, en el gobierno de Danilo o en el de Luis Abinader.
El abogado Tomás Castro tiene razón en lo que dijo y como se pronunció, aunque estamos en desacuerdo que haya llamado «pelele» al presidente Abinader.
Presidente Abinader, deje sus historietas. Nosotros publicamos cuatro auditorías, que fueron hechas a cuatro organismos diferentes de la Policía Nacional, y en todas hubo gravísimas irregularidades, hubo desfalco contra el Estado, y usted, en vez de perseguir y castigar a los desfalcadores, premió esas irregularidades.
Sin embargo, por hacer esas auditorías, el presidente Abinader castigó, puso en retiro al coronel Valerio Liriano Frías, contador y auditor de profesión, que dirigió esas auditorías. Incluso, violando sus derechos y pisoteando la Ley 107-13, sobre procedimientos administrativos, la Ley 590-16 y el Reglamento de la Policía Nacional, y eso es una vergüenza.
El presidente habla mucho y hace poco. Se ha numerosas denuncias de corrupción en contra de funcionarios del gobierno, y Abinader no hace nada.
Presidente, recuerde lo que dijo, hace 4 meses, Milagros Ortiz Bosch, que depositó ante el Ministerio Público 46 casos de corrupción, que se han presentado durante la gestión del PRM, de su gobierno. Y nada ha pasado. Así que, deje su cuento, que ya nadie le cree.
No es verdad que se persigue la corrupción, y por esa falacia, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene los ojos puestos en República Dominicana. Por casos de corrupción, y de otras cosas.
Ahora bien, eso de llamarle “pelele” al presidente Abinader, es duro, muy duro. El doctor Tomás Castro, reiteramos, tiene razón, el presidente es un flojo, lo ha demostrado en la Policía, pero hay que tratarlo con «cariño».
Es verdad que le ha faltado muñeca para combatir el desorden administrativo y operativo a lo interno de la Policía, pero no se le puede llamar “pelele”.
Señores, es una vergüenza que el presidente Abinader esté sacrificando la seguridad de los dominicanos, que el pueblo viva aterrorizado por causa de la delincuencia, y la Policía continúe siendo dirigida, ¡perdón!, mal dirigida por personas que fracasaron en otros organismos.
El presidente debe de dejar su historieta, de que combate la corrupción. Eso no es verdad, es una falacia.
Hay un coronel que se viste de santico, de humilde y de honesto, pero no se atreve a revelar, por qué en una ocasión le recomendaron la pensión, cuando se investigó su cuenta millonaria en un banco, y no pudo justificar la cantidad que tenía depositada.
Nos hicieron llegar el mensaje de que “la única actividad de ese coronel ha sido ser policía, y hoy es dueño de propiedades y hasta de botes en sociedad”.
En mi país, su país, hay que andar derechito. Nos hicieron llegar un mensaje de que, al coronel que lo están proyectando para hacerlo jefe de la Policía, también le cancelaron un hermano, y no por ir a la iglesia.
El papá de ese coronel, un general retirado de la Policía, se ha dedicado a hacer sala y visitar altares para que a sus hijos lo pongan en puestos claves y donde hay grasa. Nos dijeron esas y otras cositas, pero déjenlo ahí.
El plato favorito del editor de RI, y supervisor de ¡Cógelo, Picante!, es arroz blanco con huevo, y lo consume en su casa, así es que no se molesten en invitarlo a almorzar.
En el distrito municipal de San Luis hubo seis asaltos en menos de un día. Y eso no debe ser.
Los derechos de los ciudadanos deben ser respetados, y ningún oficial de la Policía Nacional, sin importar su rango o funciones, debe entrar, a la mala, y sin una orden judicial, a una residencia. Y mucho menos, llevarse preso a su propietario. Esto es delito.
¡Diantre! Ayer jueves nos dieron un apagón de más de seis horas, y hoy, ya se fue la luz. Otra prueba de que el presidente, no cumple con sus promesas ni con lo que dice.