Te amaré por siempre: El final de Adán y Eva
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-Y IX-
Hola amigos, ¿qué tal? Adán y Eva llevan 22 años de casados, tienen tres hijos, adolescentes ya, los cinco conforman una familia muy feliz, tomaron medidas muy acertadas, porque se amaban.
Se sometieron a terapia, Eva superó su situación sexual, Adán entendió que debía romper el cordón umbilical con su familia y ambos decidieron irse a vivir fuera, como una medida saludable incluso para salvar su matrimonio.
Víctor Martínez piensa que Adán y Eva debieron recibir una preparación más amplia y efectiva para el matrimonio, la sexualidad no puede ser un tema tratado con timidez y brevedad en los novios, educarlos correctamente en la sexualidad podría evitar muchos fracasos matrimoniales.
Es lo mismo que sucede con nuestros adolescentes, que se educan con la pornografía y las informaciones incorrectas que se transmiten entre ellos, además de las prácticas a destiempo, nadie enfrenta una educación sexual en valores, ni los padres, ni la escuela, ni las iglesias, y los pobres chicos son las víctimas de los embarazos a destiempo, los abortos, las enfermedades de transmisión sexual, las disfunciones sexuales, las confusiones en su identidad sexual y todo aquello que da cómo resultados una generación de jóvenes confundidos, sin valores, ni principios, ni una dimensión trascendental de su sexualidad.
Hoy deseo elevar al Padre mis oraciones por todas aquellas parejas que luchan por sus matrimonios, a pesar de las dificultades que se les presentan, que son firmes, valientes, juiciosos, e inteligentes al tomar decisiones acertadas, al tolerar, perdonar, aceptar, escuchar con paciencia y amor a quien Dios ha puesto a su lado.
Fin de la historia.
Hasta la próxima.
