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Tu si tienes familia

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REFLEXIONES…

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

Todos los años celebramos en noviembre el mes de la familia, muchas personas sensatas, defensoras de los principios y valores cristianos trabajan arduamente en favor de la familia.

Sabemos la importancia de la familia como célula principal y básica de la sociedad, es más hemos llegado a plantearnos que sin familia no hay sociedad sana, próspera, no hay paz, no hay amor.

Hoy hablo en nombre de tantos niños y adolescentes a quienes les hemos hecho sentir que no tienen familia, por ser su madre soltera, por el fallecimiento de uno de sus padres, por los tantos divorcios o porque aún con ambos padres viven un infierno en el hogar que ellos mismos preferirían no tener familia.

Me he pasado la vida escuchando el reclamo desesperado de miles de chicos y chicas que se han sentido marginados en esta sociedad, por pertenecer a una familia disfuncional, como la hemos etiquetado hoy.

Víctor Martinez clama al Señor en este día poniendo en sus manos todos los corazones heridos de tantos menores que en algún momento se han sentido sin familia.

Vayan a ellos mis palabras de aliento, tú sí tienes familia, tu familia sí funciona, sin importar de cuántos miembros esté compuesta, basta y sobra que tengas a una madre consagrada, luchadora, entregada, que día a día se desvive trabajando por tu educación y bienestar; no importa que estés solo con papá, él también es tu familia, en ambos casos María la madre de Jesús está presente y tu Padre Amado y Todopoderoso jamás te ha dejado solo.

Da hoy gracias a Dios por los abuelos que con tanto amor han tratado de llenar ese vacío, mostrándote que ustedes sí son familia. Existen tutores, tíos, padrinos, que Dios ha puesto en tu camino para mostrarte a través de ellos, la grandeza de su amor.

Por último, recuerda que todos somos hijos de Dios, Él nos llamó hermanos, somos una gran familia en el planeta tierra, sin importar raza, credo, estatus social, todos somos hijos de Dios, ojalá alcancemos a entender este gran principio y seamos más sensatos con los hermanos faltos de amor, alimentos, medicinas o mejores condiciones de vida.

Hasta la próxima.

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