A Pedro Castillo le tendieron una trampa; denuncia “plan maquiavélico” en su contra
Involucra en treta al líder del Congreso, a fiscal y a nueva presidente
LIMA, Perú
El destituido presidente de Perú, Pedro Castillo, desde la cárcel, escribió una carta, donde denuncia un “plan maquiavélico” en su contra, diseñado por el presidente del Congreso, la Fiscalía general de la nación y la que fuera su vicepresidente, hoy presidenta del país.
La carta fue divulgada el sábado en su cuenta de twitter por el congresista Guillermo Bermejo, con permiso del presidente vacado, después de un encuentro que mantuvieron en la misma jornada.
En la misiva, Castillo que se pronuncia por primera vez desde su detención, revela que “una fiscal sin rostro” y “un grupo de médicos camuflados” intentaron sacarle una muestra de sangre sin su consentimiento, y acusa al Congreso; a la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, y a su ex vicepresidenta, Dina Boluarte, quien asumió el cargo de la Presidencia tras la destitución de Castillo, de orquestar un “plan maquiavélico” en su contra.
“No descarto que este plan maquiavélico esté dirigido por la Sra. fiscal de la nación, el presidente del Congreso, y la Sra. Dina Boluarte”, subrayó Castillo.
En el marco la investigación preliminar contra Castillo, se le realizaron el sábado un examen toxicológico luego de que se planteó esta teoría que el ex presidente “no se encontraba en sus facultades” en el momento de leer su decisión de disolver el Legislativo y que él habría sido drogado y podría tratarse de un movimiento “inducido”.
Castillo decretó el miércoles, sin ningún apoyo, la disolución temporal del Congreso y la instauración de un Gobierno de emergencia nacional. Horas después de este anuncio, Cámara de Perú aprobó la vacancia de Castillo por “incapacidad moral”, ignorando la decisión del mandatario.
El destituido mandatario peruano seguirá detenido hasta el 13 de diciembre de manera preliminar para impedir su “posible fuga” del país, mientras que se le acusan de un presunto delito de rebelión y conspiración por tratar de cerrar el Congreso.
El que fuera, hasta el miércoles, el presidente de Perú, ahora enfrenta cargos que le podrían enviar tras las rejas, al menos, por 20 años.