Abinader ni ve ni oye ni entiende lo que pasa en la Policía
¿Cógelo, Picante!
Buenos días…
Hemos dicho una y mil veces, que en este país no hay seguridad y que quienes dirigen la Policía Nacional, no sirven, están en todo, menos dirigiendo la Policía como una institución, responsable de la seguridad ciudadana.
De ahora en adelante, todo lo que ocurra en República Dominicana, en materia de seguridad, es culpa del presidente Luis Abinader, pues fue él quien llenó de ilusiones a los dominicanos, prometiendo que reduciría la delincuencia en más de un 50%, en sus primeros 2 años de gobierno, y lleva más de 4 años en el poder, y la delincuencia está como un chivo sin ley, sin control.
¡Qué vergüenza! Dos delincuentes asaltaron a una mujer en el exclusivo sector La Julieta, cerca de la residencia del presidente Luis Abinader.
Gracias a unos ciudadanos y a una cámara de seguridad, los asaltantes fueron detenidos, cuando intentaron escapar.
El presidente Abinader no puede hacer todo, eso es cierto, y ha hecho importantes inversiones a favor de la Policía, incluso, mejorando el salario a su miembros, también es cierto.
Pero, el presidente Abinader ha puesto al frente de la Policía, en los principales organismos de esa institución, a oficiales con negras reputaciones, incluso, algunos de ellos, involucrados en actos dolosos, en corrupción administrativa, y ahí están 4 auditorías que son testigos de ello.
El Abinader es el principal responsable de la inseguridad ciudadana, de los asaltos que ocurren a cada momento, por dondequiera, hasta cerca de su residencia, de la violencia, de los escándalos que no dejan a los ciudadanos ni dormir en paz y del caos en el tránsito, porque ni ve ni oye ni entiende.
Y si no nos creen lo que decimos, vayan a Higuero Abajo, en Santo Domingo Norte, para que vean como esas comunidades están aterrorizadas por un solo delincuente, por maniático, que anda con dos armas atracando y cometiendo todo tipo de fechorías.
La delincuencia se combate trabajando, no en complicidad con los delincuentes, y en la Policía hay oficiales, y muy cerca del director de la Policía, que protegen delincuentes, y eso debería de saberlo Guzmán Peralta, aunque él está en todo, menos en combatir la inseguridad ciudadana.
El ministro de Educación, ese Ángel Hernández, parece que dirige esa institución como si fuera de su propiedad.
Eso de que otorgó un contrato por 599 millones, sin licitación, a una ONG extranjera, si es cierto, se llama corrupción, y el presidente Abinader, que prometió gobernar con transparencia, debe actuar, de lo contrario, es cómplices.
El show del caso Camaleón sigue muy activo, parece que al país le gusta esa comedia.
Nos informaron que a partir del 2028, cuando sus propulsores ordeñen bien la vaca, resurgirá Marcha Verde, pero sin mirar hacia atrás, como en el pasado, sino de frente y con miras al 32.
Los que están comiendo filete, ordeñando la vaca y llenándose los bolsillos, están mil por mil con la reforma fiscal, un huracán que representa un verdadero peligro para los dominicanos y que amenaza con incrementar la pobreza y el hambre en el país. Ese es el cambio, pero no tiene menudo para devolver, y es lo peor que le puede pasar al país.
¡Atención, país! Los gringos están alarmados, pero por la cantidad de drogas que entra y sale del país, y la proliferación de puntos de venta y distribución de estupefacientes en los barrios, sino porque en República Dominicana, hay personas que se hicieron ricos de la noche a la mañana, y parecen tener una maquinita para hacer dinero.
Nos enteramos, y no por vía de Ángel Martínez, que hay un senador oficialista, que en cuatro años como legislador, su patrimonio creció en 100 millones de pesos.
Dicen que ese legislador, nació pobrecito, que todos sus hermanos son pobrecitos, y toda su familia es pobrecita, y él se ha convertido en uno de los hombres más ricos de República Dominicana.
¿Y cuál es el secreto, senador?