Ripley, Liz María y la Policía

Por Augusto Álvarez
SANTO DOMINGO, R.D.
¡Advertencia! podría ser un cuento de abuelos!
Se llegó a decir atrás, en los años del ¡primer maestro!, que en la Policía Nacional existía un oficial, que se identificaba por el nombre de Ripley.
A diferencia de otros investigadores policiales, Ripley era, eso cuentan, un criminal nato, que al caer el acusado de cometer un delito, lo observaba y lo despachaba, en la primera oportunidad, pero de volver, no habría un nuevo día para el acusado.
Ese policía vivía, se dice, en los predios de la calle Santome, por los frentes del hospital Padre Billini.
¿Qué habría hecho Ripley con el Panadero?
De seguro, lo habría lanzado al mar en busca del cadáver de la niña Liz María, a quien despojó de su inocencia, es lo que dice el vecindario, la mató y después la tiró al Mar Caribe.
Naturalmente, la suerte del criminal estaría en salir con el cuerpo de su víctima, o flotar en las aguas, ya ahogado.
Starlin Francisco Santos, conocido como El Panadero, desde antes, incluso de Liz María tener 9 añitos, su perversidad había tocada su inocencia.
Licelot García, la madre de la niña asesinada ¿también fue consolada por El Panadero?, pues tanto ella como Liz María visitaban con frecuencia al asesino de la niña.
La investigación de tan horrendo infanticidio incluirá a su madre Licelot García? Ripley lo habría hecho.