A los poderosos parece no mimportanle el distanciamiento

Augusto Álvarez
Cualquesea el presidente, a la hora de nombrar a sus funcionarios, tendrá que disponer de un filtro especial reforzado de honestidad y transparencia.
Y sobre todo, recordar que la vestimenta ni las páginas tiradas para la izquierda, constituyen un freno para la corrupción.
La mujer del César, no sólo debe ser seria, sino que debe aparentarlo. Y ello aplica a la hora de seleccionar a los servidores del Estado.
En las redes, nuevas figuras tendrán que hacer precisiones documentadas ante la Procuraduría Especializada en Persecución a la Corrupción Administrativa (PEPCA), pues una renuncia no regresa al erario 103 millones de pesos, algunos de los cuales pudieron haberse extraviado antes de llegar a sus destinatarios.
Y en la boda en el Country Club Santo Domingo, donde dejó la soltería el sobrino del número uno de Aduanas, además de la irreverencia e irrespeto al protocolo sanitario, lo único que faltó fue poner un cartel con la leyenda: » no se admiten extraños, únicamente miembros del Club».
Pero, además, esa actividad constituyó un irrespeto a los esfuerzos del presidente Luis Abinader de frenar el avance de COVID-19.
Y, finalmente, podríamos afirmar que para poderosos y oficialistas, el protocolo de salud contra COVID-19, es un mito, no les dan importancia.