Xiomara Castro gana en Honduras por su lealtad a Zelaya
Por Kelvin Alcántara
El apoyo de Manuel Zelaya a su esposa Xiomara Castro, indiscutiblemente, fue un premio a la lealtad de una mujer, que en los momentos más difíciles, siempre estuvo al lado de su esposo.
Xiomara, en la buena y en la mala estuvo al lado de su esposo. No salió huyendo para aliarse a los adversarios políticos de Zelaya y, mucho menos, se dejó convencer de los sectores que lo derrocaron del poder.
Ella disfrutó las mieles del poder, siendo Manuel Zelaya presidente de Honduras, y tras ser derrotado, Xiomara recorrió los caminos tortuosos y sufrió las agresiones y maltratos de que fue víctima de su esposo.
Por esa razón, Zelaya siempre la apoyó y hoy, Xiomara Castro está a punto de convertirse en la primera mujer, presidente de su país, desde luego, al lado de un líder, como lo es su esposo.
Xiomara Castro pregona un socialismo democrático y propone despenalizar el aborto, reducir las comisiones que cobran los bancos a los receptores de remesas, crear una comisión internacional contra la corrupción con apoyo de la ONU y la derogación de una serie de leyes adoptadas en los últimos años.
Una de esas leyes, la que creó las polémicas Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDES), por considerar que sirven de refugio para corruptos y narcos por su carácter autónomo.
Xiomara tiene al borde del abismo al candidato oficialista, Nasry Asfura, representante de los sectores que hace 12 años le dieron un golpe de Estado a su esposo.
Asfura, quien en su campaña trató de mostrar distancia del actual presidente, Juan Orlando Hernández, señalado en cortes de Estados Unidos por presuntos vínculos con narcotráfico, no pudo confundir y está recibiendo la dos que el pueblo paga a los traidores.
