Hay que ser agradecido

AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
REFLEXIONES…
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?
Ha terminado el mes de enero, el año va rápido, hay que dar gracias a Dios por todos y cada uno de los días en que, tal como nos dice el Padre Nuestro, nos ha dado el pan de cada día y nos ha librado de todo mal.
Víctor Martínez agradece al Padre por todo su amor y por el derroche de bendiciones que cada día hace en mí, a través del Espíritu Santo, gracias por responderme, mi Dios, por permitirme dirigirme a Ti, Señor mío, y escuchar las súplicas que cada día te elevo por quienes me piden oración. Bendito y alabado seas.
Gracias a quienes nos dieron apoyo con los Mensajes de Amor inspirados por el Espíritu Santo, con sus aportes y pequeños patrocinios, durante el mes de enero, no se imaginan cuánto he orado por ustedes y sus familias para que Dios los bendiga y proteja.
Inicia ahora el mes de febrero y nos quedamos con la Fundación Farach que, de manera tan espontánea y amorosa, nos patrocinan los mensajes de cada domingo y gracias a mi exalumno agradecido que todas las semanas también nos patrocina otro de nuestros mensajes.
Tenemos patrocinio para dos días cada semana, los demás días están huérfanos, esperando la contribución de quienes deseen ayudarme en la proliferación de la Palabra de Dios a través de las inspiraciones del Espíritu Santo.
“Es hermoso recibir cada mañana un mensaje sorpresa que dejará en nuestro corazón ese toque de amor que Dios a través de usted nos envía”, decía don Rafael.
“Lo admiro por el entusiasmo y la paz con que usted transmite sus mensajes, siempre positivos y de mucha fe”, me decía doña Gloria.
“La verdad Víctor es que leerte cada día es como tomar una bocanada de aire fresco lleno de esperanza. Hasta mejor que el café o té. No dejes nunca de hacerlo. No imaginas el trabajo que hacen esas palabras diarias. Nos reconfortan, hacen pensar, nos cuestionan, aprendes y, sobre todo, reafirmamos el amor a la humanidad”. Marcelo.
Palabras todas que me animan a continuar. Gracias por utilizar a este indigno siervo tuyo, Dios mío, para tocar los corazones de tantas personas, que, con tanto amor, escuchan nuestros mensajes de amor inspirados por el Espíritu Santo.
Seguiremos tocando puertas para continuar Glorificando al Padre y llevando paz a quienes nos escuchan.
Este, nuestro último mensaje de enero ha llegado a ustedes, gracias al Ing. David Peláez.
Hasta la próxima.