Dios te esta llamando

  AYUDAME A SALVAR UNA VIDA  

REFLEXIONES…

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

La idea de reclutar apóstoles para la causa del Señor se me ocurrió una mañana que mientras oraba preguntaba al Señor: “Padre y cómo y de qué voy a vivir si me dedico exclusivamente a la proliferación de Tu Palabra, a ayudar a la gente llevando mis mensajes, mis conferencias de crecimiento para toda la familia, mis orientaciones, cada vez que alguien las reclama, dedico horas orando por todo el que me llama pidiendo oración y anoto de inmediato su nombre en mi libro de oración, cada día estoy más entregado a esta misión, pero necesito subsistir”.

Abrí la Biblia como lo hago con frecuencia en espera de que Dios me hable y me salió Isaías 41: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré; siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”.

Cuando alababa con mi salmo preferido de cada mañana el del Buen Pastor, recordé la parábola de las cien ovejas, (Mt. 18), la busqué la medité en mi corazón y encontré la respuesta.

“Vete y recluta 100 de mis ovejitas y recibirás el apoyo que a través de ellas yo te daré, algunas te darán la espalda, serán indiferentes a nuestra misión, otras se acercarán espontáneamente, y las que tu elijas como fruto de la oración y te digan que sí, serán columnas firmes que sostendrán nuestra misión por años, a ellos se les devolverá engrandecido y recordé a Lucas 6: “Den a otros, y Dios les dará a ustedes, en la misma medida que ustedes den Dios les devolverá”.

Cada día por dos meses, al orar cada mañana, he pedido a Dios poner en mi mente el nombre de la persona que debo abordar ese día, tengo más de 10,000 personas en mi WS, pero solo me ha puesto tímidamente una o dos personas cada día, a quienes, al proponerle ayudarme en esta misión, me han dado un sí o sencillamente me han evadido o ignorado, tal vez porque están meditando en su corazón su decisión.

Ojalá seas tú, que estas escuchando este mensaje, quien se sienta inspirado para formar parte del grupo de los que se acerquen a la Fundación Vidas en Desarrollo, espontáneamente. Piensa que Dios podría estarte llamando.

Víctor Martínez se siente feliz, como siempre, la seguridad que siento en mi corazón cuando tengo que enfrentar las vicisitudes de cada día y alcanzo a escuchar la voz de Dios que me dice: “No temas que yo estoy contigo”, es algo que no tiene precio.

Gracias Señor por tu apoyo, por tu relación de amistad, por tu misericordia para conmigo, por las ovejitas que me has enviado, por la vida, por los momentos felices y por los difíciles, porque a través de ellos he crecido, me he fortalecido y me he acercado más a ti.

Este mensaje ha llegado a todos ustedes, gracias a nuestro amigo Andrés López que desde España nos está dando su apoyo.

Hasta la próxima.