Juventud en crisis
Un llamado urgente para transformar el futuro de los jóvenes vulnerables en República Dominicana
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Por Rebeca Henríquez
La juventud en la República Dominicana es un recurso invaluable, pero muchos jóvenes vulnerables enfrentan un ciclo de pobreza y exclusión que limita sus oportunidades. Esta situación no solo es una injusticia social, sino que afecta el futuro del país.
El estado debe crear un entorno donde todos los jóvenes puedan prosperar. La falta de políticas efectivas ha dejado a muchos a merced de circunstancias adversas. La educación, en lugar de ser un camino hacia el empoderamiento, se convierte en una trampa con calidad deficiente y acceso limitado. Esto obliga a muchos a abandonar sus estudios o aceptar empleos mal remunerados.
La violencia en ciertas comunidades también crea un ambiente hostil, empujando a algunos hacia actividades delictivas o la migración en busca de oportunidades. Es alarmante la falta de programas estatales efectivos para apoyar a esta población vulnerable. Se requieren acciones concretas y políticas públicas que fomenten su participación activa en la sociedad.
La sociedad civil también debe involucrarse; organizaciones comunitarias y ciudadanos deben unir fuerzas para proporcionar las herramientas necesarias para que los jóvenes alcancen su máximo potencial. La juventud vulnerable merece más que palabras; necesita oportunidades reales para progresar dignamente. Invertir en ellos es invertir en el futuro del país. Si no actuamos ahora, corremos el riesgo de perder una generación entera de talentos y sueños. Es hora de actuar con determinación para construir un país donde cada joven tenga la oportunidad de brillar.