Hay gatos entre macutos con ascensos en la PN

Buenos días…

La ley Orgánica de la Policía Nacional, 590-16, llora lágrimas de sangre. Está siendo pisoteada, maltratada y violada a cada momento y no aparece, un Chapulín Colorado, Morado, Verde, y mucho menos, un Azul, que salga en su defensa.

Nos llueven las quejas de los ascensos en la Policía Nacional. Y nos dicen, que ahí hay muchos gatos entre macutos, léase, privilegios o corrupción. Y lo más triste, la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, o está ciega, sorda y muda, o simplemente, es cómplice de esa vagabundería.

Lo cierto es que hay miembros de la Policía, con 2 años, y menos de tres en el rango, que fueron ascendidos, en franca violación a lo que establece la Ley 590-16, y las disposiciones contenidas en el Reglamento 20-22, de aplicación a esa ley. Y el presidente Luis Abinader, ni ve ni oye ni entiende. Estamos huérfanos.

Parece ser, que la famosa reforma policial, puesta en marcha por Abinader, y que la ministra Faride Raful, no quiere que sea tocada, ni con el pétalo de una flor, permite todas esas atrocidades y un poquito más.

Imagínense, hasta rasos y cabos han sido ascendidos a oficiales. Y eso es una vergüenza que ocurra en medio de una supuesta reforma, que no es más que una falacia, y los hechos, así lo demuestran.

Y después se ponen guapos con ¡Cógelo, Picante!, y hasta hablan de desaparecer o sacar de circulación a su editor. ¡Adelante, Guzmán Peralta y comparte!

Sobre los ascensos policiales, en el artículo 83, de la Ley 590-16, se establece: “Los miembros de la Policía Nacional podrán ser ascendidos de rango dentro de sus niveles respectivos, cuando hayan cumplido el tiempo mínimo de antigüedad en su grado en servicio y reúnan los requisitos académicos, disciplinarios, de eficiencia y eficacia, establecidos en esta ley y en el Reglamento de Ascensos de la Policía Nacional”.

Eso fue violado por el presidente Abinader, que al parecer, firmó, otra vez, sin leer. ¿Lo engañaron de nuevo?

Pero, en el Párrafo I, del referido artículo, se establece que: «Los ascensos se harán siempre con apego al escalafón policial”, y en el  Párrafo II,  se establece  que: “El tiempo mínimo de antigüedad requerido para optar por el ascenso al rango inmediato,  nunca será menor de cuatro (4) años”.

Pero, atención, presidente Abinader, en ese párrafo II, se advierte que “La violación a esta disposición implica la nulidad del ascenso”. En este caso, los ascensos. 

Nosotros nos preguntamos, ¿por qué el presidente Abinader le permite al actual jefe de la Policía Nacional incurrir en tantas violaciones, abusos, maltratos, persecuciones, y hasta retaliación?  Lo que está a la vista, no necesita lentes.

Hubo un mayor general retirado, de la Policía, que comentó a ¡Cógelo, Picante!, que, al parecer, Guzmán Peralta, para involucrarse en el lío aquel en la JCE, hizo “algún  pacto” con Abinader, para poder cometer todo tipo de fechoría, y el presidente de la República no se atreve, ni a tocarlo. No podemos ni asegurar ni negar esa versión.

Ahí está la auditoría, que destaca un desfalco de más de 420 millones de pesos en la DIGESETT, en la gestión de Guzmán Peralta, y las inversiones que este señor está haciendo en sus fincas de Sabana Grande de Boyá, que se dice, sobrepasan los 500 millones de pesos. Eso sí es fácil de comprobar.

Eso es corrupción, presidente Abinader. Y usted, está sordo, mudo y ciego. Y Algunos organismos internacionales hablan mentiras cuando señalan que en República Dominicana se combate la corrupción. Eso es una falacia. Ahí están los detalles. Presidente Donald Trump, no se deje confundir.

Presidente Abinader, la Ley 590-16 establece la forma de ingreso a la Policía Nacional, especialmente en su artículo 61, y siguientes, y usted permite que “san” Ramón Guzmán Peralta, viole esa legislación sistemáticamente. El ingreso del hijo de Gustavo Montalvo a la Policía es ilegal. Y usted, lo permitió. «Santa» Faride Raful, es cómplice de esa vagabundería, que observe lo que establece los artículos 75 y 76, del Reglamento de Aplicación a la Ley Organiza de la Policía. 

¡Atención, presidente Abinader! El general Andrés Modesto Cruz Cruz, actual inspector general de la Policía, entre un grupo de sus amigos íntimos, se auto proclamó como próximo director de la Policía Nacional. Y lo peor, dice que su hermano José Abinader y la ministra Faride Raful,  ya se lo confirmaron.

Parece que este señor no tiene memoria, o se le olvidó que hay dos auditorías lo involucran en actos de corrupción, en un desfalco de cientos de millones de pesos, cuando se desempeñó como subdirector administrativo y financiero del Hospital de la Policía Nacional. Una de esa auditoría fue hecha en el pasado gobierno y la otra, en este gobierno.

Pero eso no es todo, en la Corte de Apelación de la Policía Nacional, existe un expediente, que involucra a Cruz Cruz, siendo Intendente de Armas de la Policía Nacional, en la desaparición de cientos de armas y municiones de ese organismo, donde, además, se destaca el nombre del hoy general retirado Rafael Atahualpa Cabrera Sarita.

Y a ese es que piensan poner como director de la Policía, que nos dicen, está siendo recomendado, además, por su cachanchán Guzmán Peralta. ¡Ave María Purísima! ¿Y es loco que están?¡Esperen! Nos llama el brillante detective y veterano comunicador, don Ángel  Martínez.