Bautismo del Señor
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
REFLEXIONES…
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?
Hoy nuestra Iglesia celebra la Fiesta del Bautismo del Señor, con la que coronamos el Tiempo de Navidad y damos inicio al Tiempo Ordinario. Recordamos la escena del Bautismo del Señor, con la que inicia su misión pública y recibe la confirmación de su mesianismo. Damos el salto del niño recién nacido, al profeta y Maestro.
El bautismo de Jesús es, en realidad, una nueva epifanía, es decir, una manifestación de Dios que se revela por medio de su Hijo, como lo hizo en Belén a los pastores y a los sabios venidos de Oriente.
Deseo ayudarles a comprender el significado de este acontecimiento y descubrir, más allá de las apariencias, que Jesús es el Hijo amado de Dios, ungido por la fuerza de su Espíritu para una misión de salvación.
Si leemos a Isaías 42, veremos que el profeta Isaías incluyó en su predicación cuatro «cantos del Siervo de Yahvé», hoy nos presenta el primero, un poema preparativo para lo que luego escuchamos en el evangelio, porque las palabras de Dios sobre el Siervo y luego sobre Jesús son muy parecidas.
El salmo 28 nos anticipa ya la designación oficial de Jesús como el Mesías y el Rey, con el que nos encontraremos en el evangelio, nos manda a postrarnos ante Dios y aclamarlo para recibir su bendición.
Interesantísimo leer el resumen que San Pablo nos hace en el libro de los Hechos de los Apóstoles 10 del episodio del Bautismo de Jesús en el Río Jordán, episodio que es luego abordado por los tres evangelios sinópticos. Hoy encontramos en nuestras lecturas la versión de San Mateo 3, que tiene algunos detalles que lo hacen un tanto diferente al de San Marcos y San Lucas.
Víctor Martínez los invita a tomar la Santa Biblia y meditar en sus corazones estas hermosas lecturas, recordando que fuimos bautizados para liberarnos del pecado y nacer de nuevo espiritualmente, al recibir al Espíritu Santo.
Gracias a la Fundación Farach por permitirnos escuchar este mensaje.
Hasta la próxima.