Coride en tiempo electoral
Jóvenes de ahora no recuerdan, y hasta es posible nunca hayan escuchados su nombre.
Coride fue un personaje del Partido Reformista que, a lomo de burro y por carecer de recursos, trató de candidatearse para síndico del Distrito Nacional.
¿Hasta dónde llegó? Por supuesto hasta donde el animal, en la gran ciudad y fuera de su realidad, permitió lo hiciera.
Ayer, es decir, en el tiempo de Coride, también existieron dragones y otras especies que sabían tragarse a los pollitos antes de llegar a gallitos.
Hasta cierto punto, la minipublicidad de la prensa de la época, en cierto modo, proyectó al aspirante, y quizás no agradó al presidente y líder, el doctor Joaquín Balaguer.
Los mejores, en regímenes de fuerzas, no aspiran, el líder lo selecciona, ese fue el método del trujillismo ¿por qué lo variaría Balaguer?
En esta campaña, los memes en las redes han sepultado las sátiras del pasado, aunque se afianza la verdad de que el pez grande se traga al pequeño.
Los millonarios recursos para comprar voluntades, nunca como ahora, se habían utilizados, forzando así el retiro de varios.