ACTUALIDADNACIONALESReflexionesREVISTA

Cuando la fe mueve montañas

REFLEXIONES...

 AYUDAME A SALVAR UNA VIDA 

 

 

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

Nos dice en Mateo 17:20 “Ustedes no tienen la fe suficiente —les dijo Jesús—. Les digo la verdad, si tuvieran fe, aunque fuera tan pequeña como una semilla de mostaza, podrían decirle a esta montaña: “Muévete de aquí hasta allá”, y la montaña se movería. Nada sería imposible.”

¿No habrá sido un poco exagerado Jesús al decir estas palabras? ¿Realmente tienen sentido? ¿Es posible que una montaña se mueva? ¿Qué nos quiso decir el Señor?

Empecemos por conocer lo que es un grano de mostaza y para qué sirve, la mostaza es una pequeña semilla que curiosamente tiene muchas propiedades buenas para nuestro cuerpo: Es antiinflamatoria, un antibiótico natural, ayuda a la buena digestión, es un buen descongestionante, según expertos, la mostaza es clave para mantener huesos, articulaciones y músculos fuertes. Los compuestos fenólicos, que están ampliamente presentes en las semillas de mostaza, son conocidos por su actividad antioxidante. Estos compuestos fenólicos reaccionan con los radicales libres en el cuerpo e inhiben sus efectos nocivos.

Las semillas de mostaza ofrecen una amplia gama de beneficios para la salud respaldados por la ciencia. Incorporar estas sabrosas semillas a su dieta puede ayudar a reducir los dolores de cabeza, mejorar la digestión, favorecer la salud cardíaca, fortalecer los huesos y los dientes, beneficiar la piel y el cabello, retrasar el envejecimiento, brindar protección antioxidante, controlar el azúcar en sangre y más. Tal vez esto nos pueda dar una señal de cómo la fe es el alimento perfecto para lograr nuestra salud física, mental y espiritual.

Pero ¿por qué usó Jesús la semilla de mostaza? la semilla de mostaza es pequeña, pero crece hasta convertirse en una planta enorme. Y es por eso que Jesús la usó para esta parábola. El reino de Dios comienza siendo pequeño, pero crecerá sorprendentemente grande. La parábola de la semilla de mostaza enseña que la Palabra de Dios, aunque pequeña en apariencia, tiene un poder transformador increíble.

Las semillas de mostaza están relacionadas desde varios enfoques religiosos como las semillas de fe y de abundancia. Esta semilla se nombra como algo muy pequeño que se multiplica y simboliza la abundancia y el fenómeno de la multiplicidad.

Jesús sabía que su reino se extendería por toda la humanidad, que llegaría a todos los rincones, que movería todas las conciencias, que tocaría todos los corazones, esa semilla de amor que un día plantaba entre sus apóstoles movería luego cielo, mar y tierra.

Víctor Martínez entiende que, nuestra fe puede convertirse en una fuente de fortaleza y confianza para los demás, incluso si comienza siendo tan pequeña como un grano de mostaza. El grano de mostaza es un profundo recordatorio del poder transformador de Dios en nosotros, a través de la fe. Estoy convencido de que mientras más testimonios de fe damos a los demás, enseñamos que con una fe inquebrantable podemos conquistar lo aparentemente imposible e inspirar a quienes nos rodean.

He aprendido que nada es imposible, pues para Dios todo es posible y quien está con Dios todo lo puede vencer, es cierto, podemos mover montañas de desesperanzas, de tormentos, de preocupaciones, de odios, de falta de perdón, de problemas, para dejarle el lugar a nuestro amado Señor quien vendrá a sembrar en nosotros semillas de mostazas.

Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestro exalumno muy agradecido.

Mañana iniciamos con nuestras reflexiones acerca del poder de la oración, ¿ya te inscribiste?

Hasta la próxima.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba