De honestidad y militancia
La política llegó a las colegiaciones profesionales, fuertemente de manos de la victoria del perredismo.
Así, excelentes comunicadores desertaron de empresas periodísticas,entrando a la administración pública.
La miseria salarial de los periodistas y otras formaciones profesionales, forzó la estampida,no obstante ¿también la falta de honestidad se llevaron?
El ejercicio de una profesión no choca ni con la ideología ni la militancia,de la misma manera que la universidad no te forma para ser honesto o deshonesto. Esa será tú decisión.
Desde el Estado, excelentes profesionales encontraron ¡la mina del rey Salomón! En tanto, otros iguales o más talentosos, se aferran a la lucha para sobrevivir.
Muchos colegios de profesionales arrancaron con los pies del pueblo, hasta recibir la orden de velar por los intereses de la empresa y los suyos propios.
¿Hasta cuándo profesionalismo y honestidad fueron pareja (en el plano nacional de los periodistas) de los colegiados?
Los gremios más afectados por el partidismo, son los médicos, educadores y los comunicadores, donde la política partidista hace trizas.
¿Que habría sido del Whasington Post (de ser dominicano), luego del escándalo de Watergate? Estaría desaparecido y los periodistas en prisión.
La formación de verdaderos comunicadores se reiteró al poner en evidencia The New Times, que la «ayuda humanitaria» con destino a Venezuela, se quemó en Colombia.