El Covid-19 se llevó al cantor
Por Augusto Álvarez
Justamente a la semana de luchar contra el fantasma de la muerte, la sonrisa de la nueva trova, quedó sobre la mesita de noche.
Aún flota entre la clase artística la figura del tribuno popular que la sociedad de Santiago vio nacer y bautizó con el nombre de Víctor Víctor, un conquistador de jóvenes que vibraron al sonido de su guitarra y de su voz.
Valoramos al cantautor, hombre que caminó junto a quienes desafiaron la oscuridad política de años superados por la dinámica de los tiempos.
A los 71 años, y luego de estar en las garras del coronavirus por una semana, la cadena de oración se rompió y fue el momento en el cual Víctor Víctor fue arrastrado a la sombra de los difuntos
A la hora de juzgarlo, quienes disfrutamos de lo que el artista sabía hacer, la inhibición es la receta y que la historia decida.
Como su género musical, en tiempos que fueron difíciles molestaron a los de arriba, el trovador, guitarra en manos, irritaba a los de arriba, y a ese cantautor santiaguero, solo podemos cantar, paz para él.
