Ellos antes y ahora
Cuentan los viejos vecinos que durante su juventud leonelisto siempre fue un buen muchacho estudioso y tranquilo.
Idéntica fue la infancia de ese otro niño, allá en el granero del Sur, donde danilito jugueteaba con los de su entorno.
Aunque provenían de zonas diferentes, ambos estudiaron, hicieron deporte (especialmente aprendieron a nadar) y entraron a la actividad política.
No más diminutivo, el pasado quedó atrás, donde el título y la palabra compañero marcan la diferencia.
También, cuando el título no está el don o señor completan la definición para el nuevo funcionario.
¿Por qué el aprendizaje de los primeros años incluía la natación? La respuesta es sencilla.
Ahora, tanto el doctor Leonel Fernández, así como el licenciado Danilo Medina, tendrán que nadar fuerte en un mar preñado de pirañas hambrientas.
Generalmente, en épocas de huracanes, el fuerte oleaje hace tambalearse a grandes embarcaciones, y el buen nadador debe estar alerta para sí la nave zozobra.