Empresario extranjero entrega viviendas amuebladas a parientes de Marileidy Paulino
Antonio Carbone había prometido entregar viviendas en 10 días y cumplió
DON GREGORIO, Niza
El empresario Antonio Carbone, en colaboración con la Fundación Carolina Denis, entregó tres viviendas amuebladas a los familiares de la medallista olímpica Marileidy Paulino.
La entrega se convirtió en una manifestación masiva de júbilo y felicidad por parte de centenares de vecinos, que saludaron la donación.
Las casas fueron construidas en los terrenos donde se encontraba la humilde vivienda de la abuela de la atleta, Esperanza Paulino, ubicada en Don Gregorio de Nizao, en la provincia de Peravia.
Esperanza Paulino agradeció al inversionista extranjero su disposición y perseverancia para proporcionar a ella y sus parientes un hogar digno donde vivir.
Expresó que su nueva vivienda trae paz y tranquilidad a ella y a las familias que ocupan las otras dos casas.
«Me siento llena de regocijo porque no hay cosa que brinda más tranquilidad que saber que en tu vejez puedes contar con un techo seguro, y hoy podemos decir que Antonio Carbone y la Fundación Carolina Denis lo han garantizado», dijo la señora Paulino.
Las viviendas fueron entregadas por Carolina Denis, de la fundación que lleva su nombre, y por el arquitecto italiano encargado de la obra, Giuseppe Timperio, quien afirmó que cumplieron con la promesa de Carbone de entregar las casas en un plazo de diez días.
Timperio detalló que las tres viviendas entregadas constan de sala, cocina, baños y dormitorios.
Además, precisó que equiparon las casas con los enseres necesarios para que las familias que las habiten estén cómodas.
Los vecinos de la familia Paulino también agradecieron el gesto del empresario canadiense y señalaron que, a diferencia de los políticos, Carbone cumplió con su promesa.
La entrega de estas viviendas no solo beneficia directamente a los familiares de Marileidy Paulino, sino que también ha generado un ambiente de esperanza y gratitud en toda la comunidad de Don Gregorio.
