En INTRANT, ¿qué hacen bien?
Por Augusto Álvarez
Cuando se habla de INTRANT (Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre), inmediatamente se piensa en desorden.
El cao vehicular constituye el pan nuestro de cada día, y la dirección del organismo regulador del tránsito ¿a qué se dedica?
El aumento del transporte ha podido ser evitado por Instituto Nacional de Tránsito terrestre, lo que podría tener la lectura de «el que venga detrás que resuelva».
Aparte de verificar si su salario fue depositado ¿cuáles han sido los logros de Claudia Franchesca de los Santos en el INTRANT?
La ventaja de los funcionarios del presente, es que en el plano personal, no temen al futuro. De ahí que privilegien la inmediatez, aprovechando la falta de consecuencia.
[La no aplicación de las disposiciones plasmadas en la ley 63-17, el caos, los largos y frecuentes “tapones” (hasta en los tiempos de COVID-19, de emergencia y distanciamiento social), el incremento espantoso de los accidentes viales y los miles de muertos por accidentes de tránsito, especialmente en los últimos dos años, tienen una única lectura, en materia de tránsito de tránsito, el gobierno de Danilo Medina, se quemó.]
Es legal que algunas rutas del transporte urbano decidan aumentar los precios del pasaje, mientras el INTRANT se limita a lavarse las manos.
Es lamentable, pero en el país ni INTRANT ni DIGESETT cumplen con su papel, plasmado en una ley, la 63-17
Un uniforme bien puesto, es importante para una inspección, un rostro maquillado impone en una pasarela… pero la honestidad y entrega en la administración pública es lo que importa a los sufragantes, a quienes pagan impuestos.
Con los agentes de la DIGESETT, como brazo ejecutor de INTRANT, si existe una voluntad política, la cruz de los usuarios del transporte, resultaría menos pesada.