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EU sigue amenazando a Norcorea pese a la cumbre Trump-Kim
Casa Blanca reitera mantendrá duras sanciones contra Pyongyang
WASHINGTON. – Estados Unidos parece no querer una solución a los conflictos que desde hace décadas vienen ocurriendo en la Penísula coreana, pues cada vez que se refiere al tema, es para arremeter contra Corea del Norte, pese a que ese país ha manifestado su intención de desnuclearizar la zona.
Ahora, la Casa Blanca advierte que seguirá ejerciendo la máxima presión contra esa nación, pese a la cita bilateral programada para la próxima semana, en Singapur.
En una rueda de prensa celebrada el lunes, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, aseguró a los periodistas que la política de EE.UU. hacia el Gobierno del líder norcoreano, Kim Jong-un, sigue siendo ejercer una máxima presión.
“Nuestra política no ha cambiado y como ha declarado el presidente (de EE.UU., Donald Trump), hay sanciones y son muy duras. Nosotros no levantaremos las sanciones a menos que Corea del Norte esté desnuclearizada”, afirmó Sanders.
Sobre una eventual reunión entre Kim y Trump, la funcionaria de la Casa Blanca adelantó que un equipo se encuentra en Singapur para finalizar la preparación logística y que permanecerá en el lugar hasta el inicio de la cumbre, prevista para el 12 de junio, a las 9 a.m. hora local en Singapur (1 a.m. GMT), precisó Sanders.
La misión diplomática estadounidense, por su parte, sigue las negociaciones con la delegación norcoreana en la Zona Desmilitarizada de Corea (DMZ, por sus siglas en inglés), que divide la península, para la referida cumbre, añadió la portavoz, quien calificó de “muy positivos” estos diálogos.
Washington sigue utilizando una retórica bélica contra Corea del Norte, a pesar de que Pyongyang ha anunciado que dejará de realizar pruebas nucleares y lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales (ICBM, por sus siglas en inglés) a partir del 21 de abril y el inicio de los diálogos con la comunidad internacional para alcanzar la paz y el crecimiento económico.
Corea del Norte, no obstante, subraya que su intención de desnuclearizar la península coreana no fue el resultado de las sanciones ni las presiones lideradas por Estados Unidos en su contra, y advierte a Washington de que no engañe a la opinión pública.
