Ex ministro de Bolsonaro buscado por acciones terroristas en Brasil se entregará a justicia
BRASIL
El ex ministro de Justicia en el gobierno de Jair Bolsonaro, Anderson Torres, acusado de golpista por dirigir los asaltos a las principales sedes de los Poderes del Estado (Palacio de Gobierno, Congreso Nacional y Corte Suprema), en Brasil, anunció, vía Twitter, que se presentará ante la Justicia y se dedicará a su defensa.
El ex ministro está de vacaciones en Estados Unidos e hizo sus declaraciones, luego de emitirse una orden de aprehensión en su contra.
Torres hizo saber que recibió “la noticia” de que el juez Alexandre de Moraes, del Tribunal Supremo de Brasil, ordenó mi arresto y autorizó un allanamiento en su residencia.
Torres está siendo señalado por Moraes como uno de los responsables de las fallas en el esquema de seguridad que resultó en la invasión a los edificios de los Tres Poderes, acción terrorista ocurrida el domingo.
El juez Moraes dispuso el martes la detención de Torres, ex secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Jair Bolsonaro, y del ex comandante de la Policía Militar de Brasilia, Fabio Augusto Vieira.
Torres estaba a cargo de la seguridad en el Distrito Federal de Brasilia durante el intento del golpe de Estado del domingo, cuando miles de simpatizantes del presidente Bolsonaro invadieron los edificios del Parlamento, la Corte Suprema y la Presidencia de la República.
Como sospechoso de haber facilitado el asalto de las sedes gubernamentales, la Policía Federal ha registrado la casa de Torres en Brasilia (la capital) en busca de pruebas.
El juez ha explicado que el exministro tenía el deber legal de adoptar una planificación adecuada para la seguridad, medida que no llegó a tomarse, por lo que hay “fuertes indicios de que la conducta de los terroristas criminales solo podría darse por la participación u omisión dolosa”.
El magistrado ha considerado que la conducta de Torres y el ex comandante general de la Policía Militar, son “extremadamente graves”, ya que pueden poner en peligro la vida del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, ministros y parlamentarios.
Ricardo Cappelli, el interventor federal para la capital asignado por Lula da Silva, había acusado abiertamente a Torres de haber saboteado el plan de seguridad definido para la manifestación del domingo en Brasilia, lo que resultó en actos de vandalismo contra las sedes del poder.