Forajidos entran a un periódico y se llevan, exclusivamente, una laptop… ¡Cógelo, Picante!
Buenos días…
Mujeres, cuídense. En 13 días, cinco mujeres han sido asesinadas, y otra, dejada casi muerta. Si esto no es un récord, es tremendo promedio.
En el día de ayer, miércoles, nos cuentan que forajidos entraron a las oficinas de un periódico matutino, de circulación nacional, revisaron y se llevaron, sólo, una laptop, donde había documentos valiosos.
Los especuladores, entre ellos el oficial que nos suministró la información, dicen que los forajidos, al parecer, querían saber cuánto millones recibía el dueño de esta laptop, mensualmente, por publicidad oficial.
Ni siquiera ese periódico ha dado a conocer el robo, y nos cuentan que es bocina del gobierno, y mantiene el hecho como secreto de Estado.
El “soplón”, que es policía, nos cuentan que los investigadores de la DICRIM tomaron muestra, hasta de las respiraciones que dejaron los forajidos haber si logran dar con ellos.
Al otrora poderoso fiscal general dominicano, Jean Alain Rodríguez, le cobrarán en euro, y con altos intereses, la persecución que desató contra una poderosa dama, que fue su subalterna, y que en diferentes épocas, trató de sacar de circulación.
A Micky López y familia, le ocurrirá lo mismo que ocurría con los comunistas en la época de Balaguer, su condena es una crónica anunciada. Igualito que Jean Alain.
Nos cuenta un amigo del PRM, del Cibao, que la sentencia condenatoria contra Micky López y otros, ya está lista, prefabricada y que, inmediatamente inicie el juicio, será entregada, por adelantado, al tribunal, para que sea homologada.
¡Ay, esperen! Nos llama una persona para preguntarnos si conocíamos a Juan Tomás Taveras Rodríguez, otrora poderoso general retirado de la Policía, que utilizó a los pensionados, en época de Danilo Medina, como chivos expiatorios, para conseguir lo suyo con Luis Abinader, y tras llegar al poder, desapareció como por arte de magia.
Estuvimos en Santo Domingo Norte, ¡atención, presidente Luis Abinader! Algunos motociclistas, que se dedican a moto-taxis, están con el grito al cielo por la “alta tarifa” que dicen, tienen que pagar cada vez que una motocicleta es retenida por la Policía.
Otros motociclistas se quejan de que, pese a tener todos sus documentos en regla, sus motos son retenidas y llevadas al cuartel de Villa Mella, donde hay un segundo teniente y un cabo, que son unos “chapeadores”, que cobran hasta por la respiración.
Dicen los quejosos, que si no pagan una tarifa de RD$1,500.00, por cada motocicleta, la misma es enviada a la DIGESETT, y allí es que la chiva retuerce el rabo.
¡Esperen! Lo que está pasando en la Nueva Barquita y sectores aledaños, sinceramente, da pánico…