General estadounidense afirma China pronto podrá destruir satélites de EU

WASHINGTON.- China pronto será capaz de destruir todos los satélites en el espacio por avances en su programa antisatélites, vaticina el alto cargo militar de EE.UU., teniente general de la Fuerza Armada, Jay Raymond, quien sostiene que esa nación está acumulando formidables capacidades antisatélites.

Según un informe publicado este lunes por la revista digital The National Interest, Raymond afirmó que Pekín ya es capaz de poner en riesgo todos los satélites de órbita baja y que “pronto todos los satélites de todas las órbitas podrán estar en peligro” debido a los avances logrados por el Programa Antisatélites de China (ASAT, por sus siglas en inglés), que viene desarrollando desde 1964.

Las declaraciones de este militar estadounidense se produjeron en el foro de seguridad de Aspen, celebrado hace una semana en esta ciudad situada en el estado de Colorado, reporta el mismo medio.

“Hace algún tiempo que sabemos que China realizó una prueba antisatélite, y recientemente supimos que dicha prueba fue exitosa”, llegó a afirmar el general ante los asistentes en el referido foro. 

En julio de 2017, el texto citando a Raymond detalló que China había probado con éxito un sistema de defensa contra misiles balísticos. Sin embargo, añade que una semana después, el Gobierno de los Estados Unidos descubrió que la mencionada prueba era en realidad un ensayo de un misil antisatélite.

“Pedimos a China que se abstenga de acciones desestabilizadoras, como el continuo desarrollo y prueba de sistemas antisatélites destructivos que amenazan la seguridad a largo plazo y la sostenibilidad del estatus quo del espacio exterior, del que dependen todas las naciones”, comentó el teniente al tomar prestado un comunicado del Departamento de Estado que se emitió el año pasado tras conocerse la citada prueba.

Esta revelación se da mientras el liderazgo tecnológico espacial de EE.UU. se está desvaneciendo, lo que beneficiaría a otras naciones que están acelerando sus avances en la guerra espacial, conforme admite un alto mando castrense estadounidense.