¿Hasta dónde es segura la seguridad?
El entrenamiento de los agentes de seguridad implica una entrega total a la protección del objetivo bajo su responsabilidad.
Y lo que es noticia es, precisamente, cuando la seguridad falla y llega la muertes.
Los Estados Unidos, desde su nacimiento, siempre ha estado dependiente de un equipo selecto de agentes secretos, quienes tienen control absoluto sobre la seguridad de sus presidentes, funcionarios, diplomáticos, entre otros.
Dejaremos que los lectores hurguen en la historia, fijen su atención en la seguridad de los mandatarios, desde el primero hasta hoy. ¿Funcionó?
Los presidentes de Estados Unidos, por razones que no vienen al caso señalar, desde los tiempos de JF Kennedy, ¿quizás de muchísimos antes?, siempre han estado en la mira de extraños personeros al margen de la ley.
Se puede apreciar el riesgoso trabajo del Servicio Secreto, primero en 1963, cuando Kennedy fue cazado, además, Ronald Reagan, logró escapar de la muerte en un pelo.
Se puede afirmar que pese a los recursos tecnológicos de que se sirve la seguridad, ¿qué la hace fallar?
El asesinato del ex primer ministro de Japón, protegido por agentes que no usan armas, salvo sus destrezas marciales, sugiere la pregunta ¿seguirán desarmados?
