Hijos de gatos cazan ratones
Atrás, por los años viejos, y posiblemente antes que la gran cosecha de los Rojas Alou, el béisbol brilló sin prensa y la no existencia de redes sociales.
Ahora ya no es ámbar la botella, pero la calidad del producto, del béisbol, se renueva en cada cosecha.
De ahí los hijos que emulan a los hijos: Vladimir Guerrero junior, Fernando Tatis y Robinson Canó… con ellos la leyenda vive.
Otros activos aún en la sombra van pisando sobre la misma ruta por donde se observan las huellas de sus padres, sin embargo, se debe esperar a que el proceso de cocción concluya.
La entrega al deporte y la disciplina ha sido la gran enseñanza de estos jóvenes que siguen la ruta de sus padres, y sin tener que realizar giros violentos a zonas donde el peligro acecha.
Robinson Canó está en el mismo sendero que lo hizo su padre cuando aún las redes no encendían las pasiones, y el aporte de Canó a los Gigantes del Cibao se duplicó en la victoria de anoche.
¡Que siga el ejemplo de los padres (Joselito -José- Canó Soriano) dando brillo y engrandeciendo el béisbol!