La DNCD entre la vista del águila y K9
Por Augusto Alvarez
Ahora es cuando la prensa nacional entiende a qué vino al país la subsecretaria de Estados Unidos, Wendy Sherman.
A distancia, la vista del águila imperial, apoyada en el olfato del perro (K9) olió y miró el floreciente aumento de la delincuencia de alto nivel y el gobierno recibió como caída del cielo a la señora Sherman.
Es posible que el titular de un periódico ¡Gobierno aprieta las tuercas…! haya sido una técnica para confiar a traficantes de indocumentados, mientras las garras de la DEA atrapaba a marcos saltando.
Ante los operativos en el lujoso restaurante donde fueron atrapadas importantes figuras reclamadas por la justicia internacional, así como la finca preñada de animales exóticos, se destaca la pifia de agentes de la DNCD, los cuales ¿ignoraron? la regular presencia de la DEA en los allanamientos que realiza el ministerio público.
El personal de la DNCD debió ser advertido de que cuando los K-9 y la vista del águila trabajan el más ligero desliz conduce al fracaso.
La pregunta clave será ante un evidente acto de corrupción de los agentes de la dirección antinarcóticos, ¿la separación es la única sanción?
El Ministerio Público puede adentrarse en su hoja de vida, y hasta verificar en bancos qué poseen?
Faltan cosas por verse, luego de la visita de la subsecretaria Wendy Sherman, por ahora no pregunten por quién doblan las campanas, ni especulan de quienes estarían cantando, pero existen capitales difíciles de analizarlos.
Otra cosa, cómo se dice, ahora, que uno de los alegados delincuentes internacionales, detenido por la DEA y RD, estaba escondido en nuestro país, donde ese personaje andaba por dondequiera, hasta tirando fotografías y firmando videos, en lugares públicos y privados.
¡Qué manera de ocultarse!
