POLÍTICA DOMINICANA: Un sentimiento político de triunfo
Con la fuerza del pueblo
Me decidí a participar en la política partidaria del lado de un amigo y líder de multitudes, Leonel Fernández, tres veces Presidente, comprendiendo que no participar y no competir, sería dejar en manos de los adversarios y sabichosos la actividad político-partidaria, aunque siempre he interactuado en la política desde mi profesión de abogado y bajo el amparo de un litigio o una consulta.
Hoy acudo al interior del país y en los barrios capitalinos apoyando la candidatura del presidente Fernández, con la certidumbre y convicción, que su liderazgo constituye un sentimiento partidario significativo, triunfal y muy peculiar en el pueblo dominicano, que le ofrece victores y le sigue con fervor en cada lugar, en donde se moviliza con su arenga.
¡No hay marchas atrás!
Como signo inequívoco que la lucha de la candidatura presidencial es irreversible y no tiene ambivalencia.
¡Tan cogió, carajo!
Es la arenga de anticipo victorioso, ante un adversario novel, esquivo, publicitado en demasía, con mirada vidriosa de la realidad social y económica del País, sustentado en el poder con la opulencia y arrogancia que se enmarca en la desfachatez.
Leonel resurge con muestras de popularidad sin igual, catapultado por la victimización de sus adversarios, idolatrado por sus obras públicas y sus políticas sociales, que apuntalaron un gran progreso y una gran transformación de la infraestructura del país, con vías de comunicación, puentes y elevados, túneles y sobretodo, el gran Metro de Santo Domingo, que marcan y simbolizan su accionar en el ejercicio del Poder.
De otro lado, Leonel, un líder identificado con los más novedosos instrumentos tecnológicos, cuyo espacio característico se visualiza en el centro tecnológico ITLA, y su visión general de que en la innovación con el desarrollo eficiente, para motorizar la economía y hacer crecer la productividad, con educación de calidad más incluyente y para una juventud con un futuro promisorio que salga del atascadero y decisión escolar y alce la mirada hacia la ciencia y el arte, con un nuevo renacimiento.
Se debate el destino dominicano.
Leonel es todo y es más que el todo, ya que se aprecia como un sentimiento de alegría y convicción político – partidaria, que desborda el PLD, con el cual vamos a colaborar y echar el pleito desde dentro, con nuestros recursos intelectuales y praxis social que avala nuestro accionar partidario, como reclama el momento político, para no dejar el espacio a los avivatos de siempre.
Quienes en nuestra juventud dimos testimonio cristiano de solidaridad con los más pobres y necesitados, llevamos ropa y medicina a los enfermos por iniciativa de nuestros padres, asistimos a dar clase nocturna en nuestros colegios, fuimos lobatos, scout conservadores de la naturaleza , cursillista de vida y comprometido con el cambio, hoy tenemos la obligación de no claudicar y retomar el testimonio que podemos transferir al accionar político con dignidad y decoro, en un tiempo de cuestionamiento partidario y falta de legitimidad de los liderazgos sociales apolillados y construidos sin base sólida , que hace tambalear la fe en el sistema electoral y partidario.
“Vergüenza contra dinero” (arenga de Juan Bosch en 1962).
Gran Liderazgo
El liderazgo de Leonel es estremecedor, convincente y sin retaliaciones, sin vacilaciones, ni componendas para dar el salto cualitativo, rompiendo las barreras silenciosas de los grupos fácticos atrasados y anclados en los métodos arcaicos del feudalismo y la sociedad de grupos privilegiadas de canonjías bizantinas, en base al Presupuesto del Estado Dominicano.
La Política dominicana
La política criolla, dominicana, que nace del púlpito con el obispo Gaspar Polanco, otra veces enaltecida de sentimiento patrio, como sembraron los padres fundadores de la República, Duarte, Sánchez y Mella (separado de Haití por siempre), hoy tiene un nuevo atardecer con el liderazgo, pre-claro, experimentado, diestro, erguido con el sentir de un pueblo cauto y sabio, que sabrá elegirlo una vez más para conducir los destinos de la Patria.
Aunque ‘’atropellado por sus propios correligionarios y perseguido con infamias y denuesto, LEONEL FERNANDEZ será el próximo Presidente de la República.
“Vergüenza contra dinero”.