Un huevo fuera del cajón…
Ya lo dijo el superior, aunque recule, «ningún hijo de madre soltera será permitido entrar al cuerpo policial».
¿Y sabrá cuáles de esos son hijos de una segunda base embarazada por un compañero de armas, que luego la dejó enganchada y posiblemente golpeada por un uniformado, quizás durante una efímera relación?
Sin embargo, lo dicho, dicho está, y cualquier aspirante a policía que se aventure en está jefatura y logre ingresar al cuerpo, pasaría más trabajo que un forro de catre antes de llegar a raso de primera clase.
Pero es importante lo dicho por el mayor general Eduardo Then, pues así los hijos de segunda y tercera base de uniformados sabrán a las instituciones, dónde tocar las puertas si realmente desean servir a la patria .
Y hasta cierto punto sorprende lo dicho por el director policial, de quién suponemos dispone de una estadística en la cual, las manzanas podridas dentro del cuerpo, provienen de madres solteras.