¿Quiénes mataron al preso ahogado?
La verdad es que las leyendas más extrañas, ahora se están escribiendo en Macorís del Mar, sin que nadie se moleste en conocer sus orígenes.
Quién diablo va a creer que un prisionero metió la cabeza en un sanitario y no la sacó hasta ahogarse. Muy activos a la hora de hacer de cualquier vivo un difunto, los agentes del «nuevo modelo»¿cumplieron órdenes?
Es posible que la autopsia no signifique nada para quienes dirigen el régimen penitenciario, tras conocer el resultado de la misma, no obstante el pueblo humilde sabe que la víctima fue torturada.
Seguir los grandes de la cultura y los gigantes de las jornadas por la defensa de los valores reales, ya no se visualizan, ahora el crimen y la tortura, desde el litoral oficial, parecen haber sido aceptado como algo normal, en el petromacorisano de hoy.
Hombres de armas, actuando en nombre de la ley, ahora constituyen el brazo exterminador, desde la trinchera del viejo y nuevo modelo del régimen penitenciario, organismo cuyo silencio da la impresión de complicidad.
Si piensan que en las canastas navideñas enviadas a San Pedro de Macorís, además de un litro de ron, espaguetis y otros ¡alimentos! Contenían faldas, erró, pues hundido entre el vicio y la miseria, otras medidas sobran.
Quizás tras hacer conciencia de la vergonzante y humillante canasta navideña, la durmiente o enajenada sultana del Este, despierte y pienses que los últimos muertos, sin las torturas, ahora gozarían de buena salud.
La traducción de lucha de un pueblo de cultura, de trabajadores por la libertad ¿Cómo podría aceptar que un hijo suyo meterá la cabeza en la pileta de un sanitario para ahogarse? Será que consideran a Macorís estúpido los señores del gobierno.
Una pregunta ¿el jefe del «nuevo modelo» carcelario y el Ministerio Público podrán explicar cómo después de muerto el infeliz, no conforme, decidió meter la cabeza en el estercolero?
