Reflexiones: Padres especiales
AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿qué tal? Ante todo, elevo mi gratitud a mi Padre del cielo quien siempre me ha tratado como a su hijo predilecto, a mi papá Miguel Ángel quien sembró en mi corazón grandes enseñanzas.
Pero hoy quiero que elevemos nuestras oraciones por esos padres especiales:
Los que se levantan día a día a trabajar la tierra siendo bendecidos por los amaneceres del campo.
Los que, tomando el pico y la pala, la carreta, el triciclo, los materiales de limpieza, salen a servirnos cada día con su trabajo.
Los que con saco y corbata se van a ocupar puestos importantes para construir una mejor sociedad.
A los tantos padres que sufren por la pérdida de un hijo, de su trabajo, de su pareja.
A los padres buenos, consagrados, responsables, que viven para sus hijos.
¿Por qué no?, por los que han maltratado a su familia con violencia, para que sientan hoy el arrepentimiento y
Dios transforme sus corazones.
A quienes han sacrificado su paternidad para servir a la humanidad, misioneros, sacerdotes.
Pidamos por los padres que están presos, que se han equivocado y se perdieron en el camino de la corrupción, las drogas, el alcohol u otros vicios, dando malos ejemplos a sus hijos.
Por los padres que cómo buenos educadores han dado su vida en las aulas, sembrando en los corazones de sus estudiantes.
Por los padres que han fallecido, por los padres olvidados, por los que no hemos mencionado.
Para que reciban hoy bendiciones en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Hasta la próxima.