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Revelan sargento buscado por muerte de oficial PN dirige una “red” de narcotraficantes

Persiguen por asesinato del teniente Cabrera Ferrer a 4 jóvenes hijos de oficiales que residen en el barrio de la PN en SDE

SANTO DOMINGO, R.D.

Al menos cuatro jóvenes, residentes en el proyecto habitacional de la Policía Nacional, en Santo Domingo Este, son perseguidos por oficiales de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM), por la muerte del segundo teniente Ramón Antonio Cabrera Ferrer, ocurrido el pasado lunes, 9 de diciembre, en el sector María Auxiliadora, del Distrito Nacional.

Los prófugos son hijos de oficiales de la Policía, y al parecer, forman parte de una supuesta red que dirige el sargento mayor Ángel Manuel Feliz Vargas (Meco), y que, según fuentes de la institución, se dedica al tráfico de drogas en sectores de Santo Domingo Este y el Distrito Nacional.

Además, de acuerdo con las fuentes, el grupo estaría involucrado en una serie de robos y asaltos a mano armada.

Las fuentes policiales dijeron que el sargento Feliz Vargas (Meco) reside en un apartamento de Ciudad Juan Bosch, que fue allanado por el Ministerio Público, que se habría incautado de varios vehículos de lujo, supuestamente propiedad del suboficial, que se encuentra prófugo.

Se dijo que los cuatro jóvenes, residentes en el proyecto habitacional de la Policía, ubicado en el sector Nuevo Amanecer, en el kilómetro 17 de la autopista Las Américas, andan armados y sus familiares se mantienen en “vigilia”, temerosos de que sean ejecutados por la Policía.

Tan pronto ocurrió la muerte violenta del oficial policial, que trabajaba en el destacamento de la institución, en el sector capitaleño de Villa Consuelo, los cuatro jóvenes “desaparecieron” del barrio de la Policía.

Según la fuente, entre el teniente Cabrera Ferrer y el sargento Feliz Vargas existían «serios conflictos» por un supuesto “tumbe” de drogas.

Feliz Vargas está siendo acusado de ser el autor de los disparos que provocaron la muerte del segundo teniente Cabrera Ferrer.

La DICRIM lo definió como un hombre “altamente peligroso” y dijo que anda “fuertemente armado”.

“Meco” tiene 40 años de edad, y al momento de cometer el asesinato del teniente Cabrera Ferrer andaba en compañía de otros cuatro elementos, que según se informó anoche a RI, son hijos de oficiales de la Policía, y andan prófugos.

Cabrera Ferrer fue baleado cuando se desmontaba de su vehículo para recoger a unos niños en un centro educativo del sector María Auxiliadora.

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