Rusia, Irán y Cuba rechazan acusaciones de EU contra Maduro
CARACAS.- Varios países se sumaron al rechazo de las autoridades venezolanas a los cargos del “narcoterrorismo” presentados por Estados Unidos contra el presidente Nicolás Maduro, lo que ha sido calificado como «un invento» para seguir conspirando contra el régimen bolivariano.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), de Venezuela, ratificó su “lealtad absoluta” al presidente Nicolás Maduro, tras acusara de “narcoterrorismo” a Maduro y a otras autoridades chavistas que hiciera Estados Unidos.
Según Washington, el gobierno de Maduro “apunta deliberadamente” a Estados Unidos con sus actividades de tráfico de drogas.
A juicio de los militares venezolanos, se trata de unas acusaciones extravagantes y carentes de prueba que han sido vertidas por el más nefasto e irracional presidente de la historia de Estados Unidos.
Horas antes, el mandatario venezolano había calificado los cargos en su contra como “vulgares e infundados”.
Varios países alzaron la voz, asimismo, contra las alegaciones de Washington. Rusia las tildó de “absurdas”.
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajarova, arremetió también contra las sanciones a Caracas y advirtió que las mismas podrían convertirse en “un instrumento de genocidio” en medio de la propagación del nuevo coronavirus, denominado COVID-19.
En la misma línea, Cuba sostuvo que aún en tiempos del COVID-19, Estados Unidos demuestra que constituye la principal amenaza a la paz y tranquilidad de Latinoamérica.
Irán, a su vez, indicó que la medida de la Administración de Donald Trump constituye una violación del derecho internacional y abuso de los mecanismos jurídicos para intervenir en países independientes.
Las nuevas acusaciones de Washington contra Caracas se producen, mientras un estudio reciente de la Oficina de Washington para América Latina concluye que Venezuela no es uno de los países desde los que se envían mayores cantidades de drogas hacia Estados Unidos.
Otros con los que Trump mantiene mejores relaciones, como Honduras, Guatemala o Colombia, juegan un papel mucho mayor en este comercio ilegal, tal y como indica la misma fuente.