Trujillo canjeó a Juana Méndez por muertos
Recientemente, la situación en Haití, y en particular, las casi 670 mil tareas de tierras que el tirano Trujillo cedió a nuestros vecinos, luego de eliminar una gran cantidad de ellos, durante la masacre de 1937.
El lugar donde está Juana Méndez, en Haití, era parte del territorio nacional, pero el gobierno de Trujillo se lo endosó al vecino Estado, en especie de disculpa por la matanza de todos lo que no pronunciaron la palabra perejil.
Aunque resulta interesante para quienes nacieron después de dicha masacre saber que Juana Méndez siempre fue territorio de República Dominicana, hasta que Trujillo ¡Donó! esas 660 mil tareas a la vecina nación.
[¿Quién fue Juana Méndez? Fue una negra, ex esclava, cuyo esposo era un hombre blanco, libre, Pablo Báez, comerciante, quien fuera alcalde de Azua, en 1821. Fue la madre de Buenaventura Báez, primer presidente mulato dominicano.]
Al margen de pagar cediendo una importante franja de terrenos a Haití, ¿cuál otra motivación tendría el sádico gobernante dominicano? Imposible elucubrar en la mentalidad malvada de un presidente.
Aunque quizá en el fondo, Trujillo quiso borrar, desprenderse de la cuota de sangre haitiana, que hacían que él llevara el negro detrás de las orejas, una herencia de su abuela Erciná Chevalier, fallecida tres años después de la masacre del perejil.
Ahora nuestros seguidores sabrán por qué al otro lado de la frontera común, existe una franja terrestre con nombre en español.