Zelaya convoca protesta para sacar del poder al presidente de Honduras
TEGUCIGALPA.- El depuesto expresidente hondureño Manuel Zelaya tomó el jueves juramento a los «comandos insurreccionales» en Honduras para sacar del poder al mandatario del país, Juan Orlando Hernández, y convocó a una «protesta nacional» el 27 de enero próximo, cuando se cumple un año de la reelección.
«Este gobernante que lleva por nombre Juan Orlando Hernández no tiene ninguna legitimidad para seguir en la Presidencia, está totalmente desautorizado por el pueblo», dijo Zelaya este jueves previo a tomar juramento a los comandos.
Dijo que su partido Libertad y Refundación (LIBRE) se ha «cansado» de invitar al Partido Nacional (en el poder) a crear «un referéndum revocatorio y una consulta popular» al pueblo hondureño.
Zelaya instó a los hondureños a «levantar su grito de protesta hasta sacar a la dictadura y vengan nuevas elecciones con reformas electorales y exista la posibilidad de que Honduras rescate el Estado hoy secuestrado por la oligarquía y un bipartidismo que solo afecta a nuestra nación y nuestro pueblo».
Ante ello convocó a una «gran protesta nacional» el 27 de enero de 2019, cuando el presidente hondureño cumplirá su primer año del segundo mandato.
«Debemos desarrollar el espíritu combativo y nuestra capacidad de lucha insurreccional. El enemigo es implacable pero no invencible», enfatizó.
El exgobernante aseguró en un comunicado que EE.UU. juega un «papel central y preponderante para sostener el sistema y esta dictadura que dirige Juan Orlando Hernández», y señaló que Honduras se ha convertido en «una triste caricatura de pobreza y violencia, de la cual solo podemos avergonzarnos profundamente».
Honduras vive una crisis derivada de las denuncias de un presunto fraude en las elecciones generales de 2017, en las que fue reelegido Hernández, bajo la bandera del Partido Nacional.
La Constitución de Honduras, que data de 1982, no permitía la reelección bajo ninguna modalidad, pero un fallo judicial de 2015 dejó abierta esa posibilidad, con lo que Hernández fue propuesto como candidato presidencial por el Partido Nacional.
El partido de Zelaya indicó que sus bases no están «dispuestas a renunciar a nuestro derecho de insurrección otorgado en la Constitución de la República».
Zelaya dijo que la única opción democrática para derrotar la dictadura es la «Asamblea Nacional Constituyente y la conformación de la Coalición de Oposición con fuerzas que comulguen con estos principios, estrategias y fines».
Destacó que sin reforma electorales sería «absurdo confiar» en la celebración de procesos de elección popular que «no brindan ninguna garantía de transparencia y respeto a la decisión del pueblo».
Dijo que los hondureños deben decidir entre «mantener esta dictadura que justifica las atrocidades capitalistas de los grupos dominantes o transformar el país y guiar al pueblo hacia una senda democrática de respeto a los derechos humanos y la clase trabajadora».
El exgobernante fue derrocado en junio de 2009 cuando intentó establecer una Asamblea Nacional Constituyente para, entre otras reformas, incluir la reelección en la Carta Magna.