Cuando me despierto
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
REFLEXIONES…
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadasim, ¿nasilsin?
Cuando me despierto, estando en la cama, aprovecho el estado de relajamiento y hago mis programaciones mentales de prosperidad, no sin antes dar gracias a Dios por el nuevo día, rezo mi acto de contrición, pidiendo perdón, mi salmo del Buen Pastor, mi Padre Nuestro, Ave María y Gloria, por último, para recordar mi infancia, “ángel de la guarda dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día”.
Luego, mientras tomo mi café, y poniendo en oración a todos los que tengo anotados me lo hayan pedido o no, leo la Santa Biblia, el noble Corán, los Cinco Minutos del Espíritu Santo, la Imitación de Cristo y por último alguna frase más que otra de Yala Ad-Din Muhammad Rumi. Invoco al Espíritu Santo y listo para escribir mi mensaje de amor inspirado por Él.
Así empieza el día de Víctor Martinez, pues si tu no lo sabías sólo fortaleciéndote cada día espiritualmente podrás salir airoso en este mundo tan convulsionado.
¿Caminatas, gimnasio, desayuno gourmet?, sí, todo eso es sumamente importante, pero no sin antes ejercitarte espiritualmente.
Nunca salgas de tu casa sin ponerte en la presencia de Dios, sin elevar tus oraciones por los tuyos, no importa cómo lo hagas, pero debes detenerte y darle ese tiempo a Dios, te garantizo que todo te será diferente.
Y pensar que hay hogares donde nunca se ora en familia y ni siquiera una Biblia existe, gracias a la misericordia de Dios, aunque lo ignoremos, Él siempre está a nuestro lado esperándonos y amándonos.
Hasta la próxima.