REFLEXIONES: Confía en el Señor
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿qué tal? Ayer iniciamos nuestros 40 días de crecimiento y fortalecimiento espiritual, hoy el Señor pone ante nosotros la vida y el bien, la muerte y el mal, y nos da la libertad de elegir si amamos al Señor nuestro Dios, seguimos sus caminos, observamos sus preceptos, mandatos y decretos, para vivir y crecer bendecidos por Él, para heredar la tierra bendita, el Reino de los Cielos.
Pero, si a cambio, tal como nos dice Deuteronomio 30, tu corazón se aparta y no escucha, si te dejas arrastrar y te postras ante otros dioses y les sirves, (léase adicciones, vicios, malos pensamientos, falta de perdón, rencor, promiscuidad sexual, maldad en tu corazón, pecado y todo lo que te aleja de Dios), entonces moriremos sin remedio, no duraremos mucho y perdemos la verdadera felicidad.
Nos dice el Padre: “Pongo delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Elige la vida, para que vivas tú y tu descendencia, amando al Señor, tu Dios, escuchando su voz, adhiriéndote a él, pues él es tu vida y tus muchos años en la tierra que juró dar a tus padres.”
Nos reafirma el salmo 1 que “Dichoso es el hombre que ha puesto su confianza en el Señor, aquel que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la senda de los pecadores, ni se sienta en la reunión de los cínicos; sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche.”
Víctor Martínez te recuerda lo que nos dice san Lucas 9: “¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero si se pierde o se arruina a sí mismo?”.
Ya es hora de trabajar esa transformación esperanzadora en nuestro interior, que refleje un cambio de vida y un comportamiento conforme a lo que Dios manda, mañana es nuestro tercer día, espero continúes a mi lado caminando, en busca de tu salud física, mental y emocional, de tu equilibrio interno, de tu paz y felicidad.
Hasta la próxima.